Desde la noche del 24 de diciembre hasta las primeras horas del día de Navidad, hombres armados atacaron aldeas cristianas y asesinaron a 113 personas en el estado nigeriano de Plateau. En una entrevista con la agencia de noticias France Press, el jefe del gobierno local declaró que más de 300 personas resultaron heridas en los incidentes, que afectaron a 20 comunidades de la región.
Jo Newhouse, portavoz del trabajo de Puertas Abiertas en el África subsahariana, explicó que probablemente la información sobre la identidad de las víctimas y los motivos de los ataques tarde en confirmarse. Sin embargo, este tipo de embestidas se vienen produciendo desde hace tiempo, ya que los extremistas del pueblo fulani atacan a menudo a las comunidades agrícolas cristianas.
«Es trágico que muchos hermanos en la fe, quienes esperaban celebrar pacíficamente los cultos de Navidad con sus seres queridos y sus congregaciones locales, hayan sido brutalmente agredidos una vez más. Los que lograron escapar con vida de la masacre están ahora desamparados, traumatizados y afligidos. Tenemos que orar fervientemente para que nuestros hermanos y hermanas experimenten la abundante gracia del Señor en medio de estas circunstancias», añade Newhouse.
Navidad en el África subsahariana
Las fiestas cristianas, como la Navidad, son un momento tenso para los cristianos que viven en zonas con presencia de grupos extremistas islámicos. Los yihadistas aprovechan la reunión de los seguidores de Jesús para atacar y asesinar al mayor número posible de personas.
Según la Lista Mundial de la Persecución (LMP) 2023, Nigeria es el país más mortal para los cristianos. De los 5.621 asesinatos de cristianos en todo el mundo, el 89% se produjeron en este país.
