Te presentamos una nota muy especial con el músico, instrumentista y compositor no vidente, Leandro Bedrossian
GIDP. Vamos a revivir un poco tu infancia. A los dos años te detectaron un tumor cerebral muy avanzado por lo que debieron operarte de urgencia en el Hospital Garrahan. ¿Qué sucedió a partir de ese momento en tu vida y la de tu familia?
Sí, efectivamente unos meses previos a cumplir 2 años se me detectó un tumor en el cráneo y me operaron en el Garrahan. Por lo que me cuentan fue una operación muy extensa en la cual existía la posibilidad de no salir con vida. Gracias a Dios la intervención resultó exitosa, con el detalle de que, por el tamaño del tumor, se pudo extraer un 95% del mismo y el resto se programó para operar el próximo año. Pero sucedió lo inesperado porque en ese periodo de tiempo el tumor volvió a desarrollarse, esta vez no en su punto de origen sino sobre los nervios ópticos, atrofiándolos. Eso causó la pérdida de la visión. A los tres años, como estaba proyectado, me volvieron a operar para quitarme por completo el tumor y esta vez lo eliminaron con muchas sesiones de rayos. Lógicamente que para mi familia y para mí no resultó fácil. Se trataba de un nuevo comienzo, enfrentarse a lo desconocido y acompañarme en una pila de tratamientos médicos que nunca parecían tener fin.
En simultáneo con todas estas terapias médicas mi vida continuaba en todas las demás áreas. Por ejemplo en la educación, tuve la bendición de cursar jardín, primaria y secundaria en un colegio común con chicos que contaban con todas sus capacidades físicas. Esto lo hacía en turno matutino y por la tarde, durante jardín y primaria, cursaba en otro colegio que era específicamente para personas en mi situación, donde me ayudaban a realizar y entender lo trabajado en el turno de la mañana.
Cuando salía del segundo colegio algunas veces a la semana me llevaban a la Escuela de Música de la iglesia, donde aprendía de forma auditiva reproduciendo lo que me enseñaban. Acá transité muchos años de mi vida los cuales recuerdo con mucha gratitud y emoción, porque es donde me formé en batería y piano.
GIDP. ¿En el seno familiar se hablaba de Dios? ¿Cuál era el lugar que Él ocupaba?
En lo personal y a lo largo de los años Dios fue ocupando el centro. Al principio lo tomaba como una historia o como un cuento hasta que fui creciendo y experimentando la realidad de su persona, la compañía de su presencia y el obrar magnífico de su poder sobrenatural.
GIDP. ¿Lo que aconteció en tu vida fue motivo de enojo hacia el Señor, o fortaleció a la familia?
Bueno, diría que son 2 preguntas muy distintas; si tengo que hablar de lo personal no puedo negar que por mucho tiempo me enojé y renegué con Dios. En varias ocasiones le preguntaba con dolor por qué había permitido la pérdida de mi visión y permanecía por largos espacios de tiempo llorando hasta quedar sin lágrimas. Lo magnífico era que cuando ya no tenía más fuerzas para llorar era cuando podía sentir la caricia de Dios, y Él me hablaba a través de los pensamientos y podía escuchar Sus palabras diciéndome: ¿por qué te entristeces hijito? ¿Acaso mi gracia no te es suficiente? ¿Acaso tiene más valor tu vista que el sacrificio de mi hijo Jesús en la cruz? Esas preguntas me dejaban atónito y era en ese instante, de forma maravillosa, cómo mi enojo, mi tristeza y mi resignación eran inhibidos por su amor que me abrazaba, me levantaba, me fortalecía y me animaba.
En cuanto a lo familiar, tanto mis padres como todo mi entorno familiar mantuvieron constantemente la vista fija en Dios. Puedo imaginar que como todo humano habrán tenido momentos de dolor y de angustia, pero también estoy seguro de que eran fortalecidos en gran manera al ver cada progreso, cada logro que iba obteniendo y observando cada talento que Dios iba despertando en mí.
GIDP. ¿Entre los miembros de tu familia se escuchaba música? ¿Cuándo comenzó tu interés por ella y tu deseo de conocer más acerca del ámbito musical? ¿Cuáles fueron los instrumentos musicales que te llamaron la atención y por qué?
Constantemente había música en casa, siempre la riqueza del arte estuvo presente tanto con mi papá en el piano y mi mamá con la danza, también por parte de mi tío Gabriel Bedrossián (mi profesor de Piano) quién fue y es un excelente referente por su gran talento y profesionalidad en la música.
Puedo contar que a los 5 años comencé a estudiar batería por un pedido mío, pero si tuviera que hacer memoria de cuándo comencé a sentir interés por la música, honestamente no lo recuerdo. Como siempre digo: “yo no busqué a la música, sino que ella me encontró y me conquistó a mí”. Es un amor muy grande que tengo por el arte que hago. Esa misma pasión a la que hago referencia es, desde que tengo uso de razón, la que me motiva a capacitarme cada día más, para seguir aprendiendo y superándome.
Bueno el instrumento que más me llamó la atención fue la batería, quizá pueda ser porque se trató del primer instrumento con el que me inicié en este mundo musical. Pero, además, creo que es por esa adrenalina que siento al ejecutarla. Cada tiempo que paso con ella es como si me desconectara por un ratito del mundo y olvidara todo tipo de problemas. El otro instrumento por el cual siento mucho cariño es el piano porque gracias a él pude escribir muchas canciones y armonizarlas. Con el teclado vivo momentos mágicos porque a través de él me conecto con Dios, puedo orar, cantar y expresarme con todo mi corazón. En estos momentos es donde Dios más me habla.
GIDP. ¿Tienes algún referente dentro de la música nacional o internacional que te impactó y al que admires?
Tengo unos cuantos artistas de los cuales aprendo. Al escucharlos descubro nuevas herramientas. Algunos de los que podría mencionar son: Marcos Witt, Esperanza de vida, Israel Houghton, Marcos Vidal, Coalo Zamorano, Torre Fuerte, Toque no Altar, Trazendo a Arca, Sinergia, Puerto Seguro, Templo, Boanerges.
GIDP. ¿Cómo fue tu primer encuentro personal con Dios? ¿Crees que después de tomarte en Sus brazos, ante la prueba, Dios fue moldeando tu carácter?
Fue cuando tenía 8 años, recuerdo que Él me cantó mi primera canción, la que titulé “Cada cual tiene su lugar”. Una frase decía: “Cristo me llamó y yo le abrí, ahora me siento nuevo”. Eso me llevó a decirle Señor yo quiero que me hagas nuevo, quiero ser una nueva persona, quiero ser distinto y que me aceptes como tu hijo. A partir de ahí sentí como mi vida comenzaba un rumbo con una dirección efectiva sabiendo que camino cada día procurando llegar a los brazos de Jesús.
Sin lugar a duda Dios cada día moldea mi carácter, aunque a veces sean procesos extensos y dolorosos, pero estando en Sus brazos y tomado Su mano las dificultades son absorbidas por Su misericordia, Su amor y Su gracia.
GIDP. El 2013 fue un año muy especial porque ingresaste como miembro estable a la Banda Sinfónica Nacional de Ciegos «Pascual Grisolía». ¿Qué instrumento ejecutabas y cómo fue esa experiencia?
Eso fue realmente estupendo, para contar lo siguiente tengo que retroceder un par de años. Cuando concluí el secundario decidí continuar mi carrera musical con el clarinete y fue así como en 2011 inicié mis estudios con el profesor Alberto Brass, quien me acompañó durante todo mi trayecto.
Una anécdota que recuerdo es que la primera clase le expresé mi interés de trabajar en la banda sinfónica y él, sin conocerme, me dijo que para eso necesitaba unos seis o siete años. Esto me desilusionó bastante pero continué
con mi objetivo, así que puse todo mi empeño para acortar los años pronosticados. Fue entonces que, a mediados de 2013, me enteré de que para diciembre se abría un concurso en la sinfónica. Volví a plantearle mis ganas al profesor y él me dijo que en los 2 años y medio de estudio que llevaba había adelantado mucho más de lo que el promedio hacía, por lo tanto consideraba que tenía posibilidades de concursar. Así fue, esos meses intensifiqué mucho las horas de estudio hasta que llegó el día. Era lo que tanto había soñado y por lo cual me había esmerado.
Hasta el día de hoy recuerdo ese concurso, con muchos nervios pero con mucha seguridad. Llegué una hora antes (cuando todavía no había nadie), ahí mismo me arrodillé y le dije a Dios: “Papá, si esto está dentro de tu propósito y me permitiste estar acá, dame la victoria”.
Luego de rendir me quedé esperando la nota fuera de la sala junto a mis padres que también habían venido a escuchar el concurso y a apoyarme. No existen palabras para expresar la alegría que sentí cuando se abrió esa puerta y mencionaron mi nombre. Así fue como comencé a tocar en la Banda Sinfónica Nacional de Ciegos en el cargo de tercer clarinetista durante 2 años. Después se abrió una vacante para un cargo bastante más alto y le pedí a Dios en oración que me iluminara si era el camino que debía seguir. Decidí tomar el desafío y después de prepararme en diciembre del 2015 volví a dar otro concurso ganando el cargo de guía de segundos clarinetes, que ejerzo hasta el día de hoy.
GIDP. ¿Cuándo nace tu primer material discográfico ‘Única Salida’? ¿Por qué lo titulaste así? Cuéntanos acerca de ese lanzamiento.
El disco fue lanzado el 1 de mayo de 2021. Lo titulo ‘Única salida’ porque considero que la única salida para poder vivir en este mundo, libre de opresión, limpio de maldad y llevando una vida sana, es a través de Jesús. Me llevaron muchas horas de dedicación desde lo musical y también desde mi búsqueda en Dios, porque para poder transmitir semejante mensaje debía estar en sintonía con Él. Para entender lo que él quería que yo lo escriba en las canciones, porque tengo muy asumido que Dios es el compositor de mis temas. Yo, simplemente, trato de bajar en un formato de música todo lo que Él me habla.
En cuanto al procedimiento de su creación fue grabado en el Estudio Garra. Llevó aproximadamente 2 años hasta tener el producto en las plataformas digitales. El material cuenta con 10 canciones de mi autoría y a las cuales les hice los arreglos musicales con un aporte muy significativo del arreglador que estuvo trabajando en el proyecto.
Este álbum cuenta con la participación especial de la artista Miriam Bloise, con quien compartimos la canción “Su confianza”, que habla de la confianza que transmite Dios.
GIDP. ¿Cómo defines tu música? ¿Cuál es el estilo?
Trato de ser creativo. Intento no imitar para no repetir el estilo de algún artista conocido. El álbum ‘Única salida’ está orientado a un rock nacional, pero también hay otros estilos, en el disco que estoy proyectando para este año que se vuelca más a lo que conocemos como worship o música para tener un tiempo de intimidad con Dios.
GIDP. ¿Cómo nacieron cada una de las canciones de ‘Única Salida’? ¿Las letras se basan en tus vivencias personales o qué historia hay detrás de ellas? ¿Qué tiempo te llevó escribir los temas de tu CD?
Como conté anteriormente cada canción nace luego de tiempos en la presencia de Dios, de estar buscándolo, escuchándolo y procurando entender qué es lo que Él me pedía que escriba.
Algunas letras son de experiencias personales, otras son de alguna historia que me ha marcado. Lo que busco a través de cada una de ellas es llegar a confrontar con la necesidad de las personas y poder expresarles en los pocos minutos que dura la canción, que Dios es la única salida y la solución para los problemas que puedan atravesar.
La composición de los temas fue pasando por muchas etapas: momentos en los cuales tenía ganas de borrar todas las canciones, otros en los cuales sentí entusiasmo, tiempos de incertidumbre y tiempos de inspiración. No soy de llevar con exactitud las fechas pero, haciendo cálculos, pasaron más o menos 10 años desde que escribí la primera canción hasta que decidí grabar el CD.
GIDP. ¿Cuál es el mensaje que deseas transmitir a través de tus canciones?
Básicamente, que Jesús es la esperanza que las personas están buscando en muchos lugares de diversas maneras. Él está solo a la distancia de unas simples palabras como decirle: “Jesús te acepto como mi Señor y Salvador, quiero que seas el dueño de todo”. A partir de eso puedo asegurarte de que nada va a ser igual porque Jesús se va encargar de superar ampliamente las expectativas de todo lo que estabas buscando.
GIDP. ¿Tienes algún tema propio o ajeno que siempre te emociona al escuchar? ¿Por qué?
Una de las canciones que más me llegan es “Tu mirada” de Marcos Witt. Creo que me es muy significativa porque yo no conozco lo que es una mirada, sin embargo la mirada de Dios me llena de su paz y él me mira de la forma que sabe que yo lo puedo ver.
GIDP. Seguramente tendrás amigos o conocidos que nunca escucharon de Dios. ¿Cómo logras mostrarte embajador de Cristo, sin llegar a la controversia?
A través de mi conducta en lo cotidiano, de escuchar, de dar algún consejo, de hacer algún favor sin esperar nada cambio, de ofrecer algún regalo porque sí, de compartir un abrazo, de ser educado o demostrar responsabilidad ante los compromisos. Trato de llamar la atención en cada uno de estos aspectos mencionados hasta el punto de que la gente se sorprende y cuando me preguntan ¿por qué soy distinto? Eso me da el pie para decirles que quien me hace distinto es Cristo.
GIDP. ‘Única Salida’ no solo fue tu disco debut, sino que además te colocó en el umbral de un nuevo camino en el ámbito nacional e internacional. ¿Cuáles son tus expectativas al ingresar a la familia de Accento Music?
Mi expectativa con la música, o de la forma que sea, es anunciar que Jesús es la salvación, ese es mi único objetivo y el desafío más grande. Que al escuchar mis canciones puedan entender quién es Cristo y a partir de eso decidan comenzar un nuevo camino que los conduce a Dios.
GIDP. ¿Mirando hacia atrás, y recorriendo tu carrera musical, ¿Cuáles son tus asignaturas pendientes?
Mi asignatura para cada día es renunciar a mis deseos para vivir en el propósito de Dios. Por más objetivos o logros que pueda proponerme como meta, si no están dentro de la voluntad de Dios no tienen ningún sentido.
GIDP. A la hora de elegir un libro de la Biblia o un versículo. ¿Cuál es tu preferido?
Uy eso sí que es muy difícil de elegir, siento que la Biblia está llena de perlas y diamantes que ninguno de ellos pueden ser desperdiciados, pero si tuviera que quedarme con un libro me quedo con los salmos por la gran capacidad que tenía el salmista para componer. Y si debiera darte algún versículo, podría decir que es Josué 1:9 “Yo te pido que seas fuerte y valiente, que no te desanimes ni tengas miedo, porque yo soy tu Dios, y te ayudaré por dondequiera que vayas”.
GIDP. ¿Cómo te imaginas el momento en qué te encuentres cara a cara con Dios? ¿Cómo reaccionarías? ¿Qué harías, qué le preguntarías?
Me imagino como el mejor momento de mi vida. Si llego a ese momento voy a entender que mi tiempo en la tierra no fue en vano. Creo que me rendiría a sus pies, lo abrazaría bien fuerte sin soltarlo y le diría ilimitadamente cuánto lo amo. No creo que en ese momento haya lugar para preguntas, pero si lo hubiese la única pregunta que le haría es: ¿pude cumplir el propósito que vos planeaste para mí?
GIDP. Tu testimonio puede impactar en la vida de otras personas de manera especial. Imagínate que entre los miles de personas que estarán leyendo esta nota, muchos no conocen a Jesús y otro tanto no se anima a perseguir sus sueños tomados de Su mano. ¿Qué mensaje le dejarías para alentarlos a confiar en Dios y permanecer siempre a su lado?
Que existen 2 caminos, el camino de sálvese quien pueda de la forma y de la manera que cada uno elija. Ese camino, aunque en su comienzo esté maquillado como algo bueno, siempre conduce a la derrota. Y el otro camino se llama Jesús, es la única salida para la dificultad: sea enfermedad, económica, familiar, adicciones, amistad. Para lo que quieras Él tiene la solución, te aseguro que nunca falla. Quizá alguna vez no es la respuesta que estabas esperando pero por experiencia propia te doy garantía de qué siempre es la mejor respuesta. De todo corazón, el consejo que te puedo dar es que le des una oportunidad a Jesús, él está esperando tu amistad para empezar a cambiar todas esas cosas que están desordenadas. Las personas pueden fallarte, los negocios pueden salir mal, los remedios pueden no ser efectivos, pero Jesús sí lo es para todo lo que necesitas. De verdad, créeme, no te vas a arrepentir.
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Locutora y actriz de voces egresada del Instituto Superior de Enseñanza en Radiodifusión (ISER) en 1985, se especializó en oratoria con Cursos de Técnicas de la voz en el Teatro Nacional Cervantes.
Años después, dedicada al doblaje y acting publicitario, se perfeccionó en la Asociación Argentina de Actores con Dora Guzmán y Ema Ledo (Civiza), realizó Seminarios Intensivos de Doblaje con Dany de Álzaga en Palmera Records; Curso Intensivo de Neutro en Dibujos Animados con Cecilia Gispert y Seminarios de práctica en Ibero que le permitieron llegar a Disney, donde quedó seleccionada como actriz del staff. Luego de conducir durante el 2005 el programa de contenido musical “La Fusa, una nota para pensar” y “La Pisada TV” se abocó a la redacción, entrevista y corrección del periódico El Sello, uno de los tantos productos que contiene el Multimedios La Pisada Producciones que dirige su esposo Carlos Guilermo Teso, tarea que hasta la fecha llevan a cabo desde hace 17 años con pasión y gozo.
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