La cantante brasileña Talita Cumi nos cuenta sobre su vida y el lanzamiento de “Levántate”.

GIDP. Vamos a remontarnos a tu niñez. ¿Cómo fue tu infancia? ¿Vienes de una familia cristiana? ¿Qué te estimuló a relacionarte con la música?

Crecí en un hogar cristiano en Brasil, en una ciudad llamada Içara. Tuve una infancia tranquila y feliz, mis padres trabajaban, yo iba a la escuela y entre medias compartíamos momentos juntos en familia.

Siempre íbamos a la iglesia, mis padres ensayaban todos los viernes en la iglesia ya que participaban de la Orquesta Sinfónica Celebraçao, de la Iglesia en Içara, Santa Catarina, Brasil.

Además, mis padres también formaban parte del coro y eran a menudo invitados a cantar como pareja en diferentes iglesias y congresos. Es por eso que la música siempre ha sido algo súper cercano para mí. He crecido rodeada de músicos, todos los amigos de mis padres participan en la Orquesta y también eran músicos.

Incluso un amigo de mi padre abrió un estudio de grabación en Brasil y tras emigrar a España, cuando volvimos a Brasil después de 6 años afuera, tuve la oportunidad de ir a ese estudio de visita y probar una grabación.

GIDP. A tus 8 años, junto a tus padres emigraste a Zarauz, en la provincia de Guipúzcoa, comunidad autónoma del País Vasco, España.

¿Por qué surgió este viaje y cómo se adaptó la familia a las costumbres de un país diferente? Teniendo en cuenta la relación que tenían con Dios ¿Cómo fue el proceso en la búsqueda de una familia de fe en un país en dónde no abundan las iglesias evangélicas?

Este viaje nació en el corazón de mis padres con el deseo de tener una vida mejor. En Brasil había muchas cosas que les impedían a mis padres tener una vida laboral y prosperar. También creo que todas las puertas cerradas fueron beneficiosas para abrir la puerta a lo que Dios tenía preparado para mi familia al otro lado del charco.

Quizás en aquel momento mis padres lo vivían como un gran sufrimiento, las condiciones no eran las mejores, pero Dios les estaba preparando para todo. Yo como niña solo tenía la ilusión de tomar por primera vez un avión.

Cuando llegamos a Zarautz no había iglesia evangélica, mis padres comenzaron a crear lazos con otras familias del colegio donde estudiaba, pero sin duda ellos sabían que necesitaban congregarse. Por esa razón empezaron a hacer pequeñas reuniones en casa y poco a poco esas reuniones fueron creciendo, recibiendo siempre el respaldo pastoral desde Brasil. Hoy en día ya somos 2 iglesias con varias obras misioneras en diferentes países (África, Nicaragua, India). He visto a muchos cristianos huir de su llamado porque llegan a un lugar donde “no abundan las iglesias” o donde “no hay cristianos”. Pero doy gracias a Dios por la vida de mis padres quienes me enseñaron que no hay excusas para aquellos que tienen a Dios en primer lugar en su corazón. Hubo varias caídas y fallas, y eso es normal pues somos humanos. Muchas personas se han levantado en contra de mi familia, pero hay algo que sé: detrás de esas dos iglesias existen más de 17 años de trabajo, donde se han ido y han llegado muchas personas, pero podemos reconocer que Dios es el centro cuando hay frutos y cuando el ministerio sigue creciendo cada día. Donde Dios está, hay fruto y Dios provee para que todo tenga crecimiento.

Doy gracias a Dios por la vida de mis padres quienes me enseñaron que ante un llamado del Señor no hay excusas para aquellos que tienen a Dios en primer lugar en su corazón.

GIDP. A pesar de tu corta edad, las interacciones y experiencias que viviste seguramente desarrollaron en vos un carácter y una personalidad especial. ¿Todo este cambio familiar motivó que comiences a involucrarte en la música?

La música ya era parte de mi vida, el cambio familiar motivó a que creciera musicalmente. Debido a que comenzamos a hacer pequeñas reuniones en casa, mi padre predicaba en portugués y yo cantaba junto a mi madre en portugués. Más tarde la casa comenzó a recibir personas de habla hispana y a raíz de eso tuve que cantar en castellano, además de aprender a traducir las predicaciones de mi padre. El cambio familiar no fue un motivo de involucración con la música sino un refuerzo.

GIDP. ¿De qué manera fue creciendo todo este movimiento evangelístico familiar con el correr del tiempo y cómo resolvieron el tema del idioma?

El movimiento evangelístico fue creciendo con el apoyo pastoral de los pastores de Brasil y España, a través de la preparación ministerial y teológica. La barrera idiomática no era tanto para mis padres pues ellos fueron aprendiendo el castellano poco a poco, pero sí lo fue para mí que me encontré con una mayor dificultad al escolarizarme.

En Zarautz el idioma predominante en las escuelas es el euskera, un idioma, que, si bien es muy bonito, a la vez es muy complicado. Me costó muchísimo aprenderlo y, de hecho, podría decir que sigo aprendiendo. El euskera es uno de los idiomas más antiguos del mundo. Mis padres se relacionaban con personas de habla hispana, y yo también. Por ese motivo, en base a la práctica, el castellano no ha supuesto una dificultad mayor.

«Decidí estudiar Trabajo Social. Sabía que con esta carrera Dios me abriría puertas para estar cerca de personas que lo necesitan a Él y sin duda, Dios no se equivoca en sus planes».

GIDP. Tanto en el ambiente de la música nacional como internacional ¿Admiras o te identificas con algún solista o grupo en especial?

No me identifico con ningún grupo o solista, pero sí admiro a muchos. Crecí escuchando a Aline Barros y a Ana Paula Valadao, quienes sin duda han sido de gran ejemplo para mí en el área musical. También admiro mucho a la solista Gabriela Rocha. Todas ellas de Brasil.

GIDP. A tus 18 años, comenzaste a involucrarte como líder de jóvenes en la iglesia, y a dirigir el grupo de alabanza. ¿Cómo fue evolucionando tu vida para llegar a esta instancia tan importante? ¿Si tuvieras que elegir un instrumento musical, cuál es el que más te apasiona ejecutar?

Pude ser partícipe del crecimiento de la iglesia. Creo que a medida que la iglesia iba creciendo yo también lo hacía. De hecho, fui la primera integrante del ministerio de alabanza junto a mi madre, cuando solo cantábamos con pista. Y lo mismo ocurrió con el ministerio de jóvenes, aunque al principio no era la líder sino una participante más. Cuando alcancé una cierta madurez mis padres me propusieron esta posibilidad. Yo acepté porque sabía que tenía el respaldo de ellos y a su vez el de Dios.

GIDP. Al margen de tu trabajo con la iglesia, en lo personal decidiste ingresar en la universidad. ¿Qué carrera elegiste y cuál fue el motivo que te impulsó hacia ella?

Decidí estudiar Trabajo Social, una profesión que requiere un gran esfuerzo práctico y ser alguien empático que ama a las personas. Creo que ese fue uno de los motivos que me hizo escoger el trabajo social. Sabía que con esta carrera Dios me abriría puertas para estar cerca de personas que lo necesitan a Él y sin duda, Dios no se equivoca en sus planes. Durante mi carrera comencé a apasionarme por las familias y las parejas. Por eso al terminarla empecé mi máster en Terapia de Familia y Pareja. Hice dos años de formación en la Escuela Vasco Navarra y ahora voy por mi tercer año en la Escuela de Terapia Familia de Sant Pau en Barcelona… Me queda solo un año para acabar mi máster y siento mucha gratitud al Señor por darme esta oportunidad. En todo lo que he escogido siempre he pensado primero en cómo eso le ayudaría al reino. Si hay matrimonios sólidos, también habrá familias sólidas, y si las familias están sólidas, la iglesia también lo estará.

GIDP. Este habrá sido un tiempo de mucha exigencia para vos, con tantas responsabilidades. ¿De qué manera cumpliste con Dios, familia, amistades, universidad y ministerio? ¿Te sentiste agobiada o disfrutaste de cada una de tus acciones?

Dios no nos da una carga mayor de la que podamos soportar. Aunque en algunas ocasiones sentía agobio, puedo decir que lo disfrutaba mucho más porque ¿quién no siente agobio de vez en cuando? Lo importante es saber organizarse. Siempre me preguntan de dónde saco

Tiempo. Cuando invertimos una hora con el Señor, pueden ser como las 8 horas que dedica una persona que no tiene a Cristo. Nunca dejé mis servicios de lado, nunca dejé de ir a la iglesia porque tenía un examen, al contrario. Siento que cuanto más me sacrificaba para Dios, más ponía sobre mí Su mano y yo podía sentir Su respaldo. Aunque en aquel momento fue duro, hoy puedo ver los frutos.

Cada mañana al despertarme podía leer en grande un versículo que había en mi habitación: “Esfuérzate y sé valiente”. La palabra de Dios es la clave, por eso meditar en ella de día y de noche es lo que nos llevará al éxito, y con éxito me refiero al plan de Dios y no lo que nosotros consideremos que debemos recibir.

GIDP. ¿A qué edad compusiste tu primera canción “La esperanza de Su amor”? ¿Qué deseas transmitir con este tema?

Esta canción la compuse yo concretamente el día 8 de diciembre de 2020. Circunstancias difíciles que viví durante ese año me llevaron a Omar, una decisión en mi vida, que como decía antes, fue entregarme a Dios por completo. Comencé con un propósito de lectura Bíblica que ya he terminado (actualmente sigo con uno nuevo), y cuando leía la palabra, el Señor me llevaba a alabarle y a cantar cánticos nuevos.

Tardé meses en entender que Dios me estaba llamando a escribir aquellas palabras que salían de mi boca. Por eso, aunque comencé el propósito de lectura en febrero, no fue hasta el día 8 de diciembre que abrí un “Documento” y me puse a escribir. Más tarde conocí a Oscar y él, como buen músico y siervo de Dios, me ayudó a darle forma a esta primera alabanza.

“La esperanza de Su amor” habla de cómo Dios nos ama, de cómo Él me ama a pesar de todo. Que no importa lo que podamos llegar a vivir o las dificultades que vamos a tener, el amor de Dios trae esperanza a nuestras vidas. Esta canción está basada en Habacuc 3, pasaje que mis padres por mucho tiempo aprendieron y les ayudó a superar dificultades. Mi deseo es que muchas personas puedan sentir ese amor incondicional de Dios.

GIDP. Con la canción “La Esperanza De Su Amor” presentas el video clip. ¿Cuéntanos detalles de la filmación y dónde fue realizado el video?

La comencé a grabar en enero de 2021. La verdad es que la canción tardó mucho más de lo previsto, pasaron muchas cosas, tuve pruebas y luchas que hicieron que el proceso de grabación se detuviera, a tal punto de querer abandonarlo todo. Pero mi corazón se alegra porque, aunque haya sido un proceso muy largo, Dios siempre ha estado conmigo.

Esta canción tiene muchas nacionalidades, ha sido grabada en diferentes países y en 4 ciudades. Oscar Ortega ha producido toda la parte musical en Honduras. Tuve el privilegio de grabar la voz en un estudio de mi pueblo, en Zarautz (Nois Estudioa), con la ayuda del Ingeniero de Sonido Iosu González Etxabe. La canción cuenta con unas voces especiales grabadas en un estudio en Brasil, Mafra, hechas por el Pastor Adonias Monteiro, alguien importante para mi familia. Y el vídeo fue grabado en Barcelona con un gran amigo, Javier Consuegra.

En el vídeo cuento con el apoyo de una gran danzarina llamada Galilea González Vergara, también con un actor y amigo llamado Samuel Miller Herrera, la participación de Javier Consuegra que grabó el vídeo y de la Pastora Betty Vergara que me hizo el maquillaje. Y no puedo dejar de mencionar el apoyo en todo tiempo de Sebastián González quien me ayudó con la melodía de esta canción y, además, nos dejó su cuarto para hacer la grabación de la historia.

GIDP. Recientemente, iniciaste un nuevo camino en tu carrera musical incorporándote a Accento Music y esto se coronó con el lanzamiento de “Levántate”. ¿Cuáles fueron tus expectativas al ingresar a la familia de Accento?

Ingresé en Accento Music a través de la recomendación de una amiga y hermana. Mis expectativas eran poder sentirme acompañada en este proceso ministerial y también personal. Sé que no solo comprenden la parte musical, ellos saben que soy una persona normal que a veces puedo equivocarme y errar. Con ellos puedo seguir creciendo y aprendiendo.

«Nunca te rindas, no dejes de luchar. Aunque a veces el camino parezca difícil, esas dificultades te harán crecer y seguirán siendo un impulso para correr esa carrera que Dios nos ha dado, con gozo».

GIDP. ¿Cómo nació esta nueva canción y por qué tiene raíz en tu historia y tu nombre?

La canción “Levántate” nació mientras la cantaba. Cuando era pequeña no me gustaba mi nombre. Les preguntaba a mis padres por qué me habían llamado “Talita”.

Era algo extraño, pero a veces incluso tenía vergüenza de decir mi nombre. En Brasil es habitual llamarles a las niñas Talita, es un nombre común, pero a mí no me agradaba nada. Un día el Señor me confronta y habla directamente a mi corazón. Me dice la razón por la cual me llamo “Talita”, recordándome que no fueron mis padres quienes me pusieron ese nombre, sino que fue algo dado por Él. Y directamente me voy a esa historia de la hija de Jairo en la Biblia. A pesar de que la había leído muchas veces, no me había dado cuenta de la profundidad de esta palabra.

Así que una tarde de abril de 2021, al regresar desde el trabajo a casa, conduciendo el automóvil, mientras subía las montañas de Aia, empezaron a surgir estas palabras. Directamente detuve el coche, puse la grabadora a grabar y seguí conduciendo mientras cantaba estas letras y su melodía. Llegando a casa me senté en el piano y junto con Sebastián sacamos los acordes de la canción.

Entendí que no se trataba de mi nombre, sino del significado y la profundidad. Dios me enseñó a amarlo y agradecer por sus detalles tan pequeños, que hasta en nuestro nombre Él se fija. “Levántate” me recuerda que no importa la caída, lo importante es levantarme para seguir adelante. “Levántate” es mi historia en canción, porque muchas personas me dijeron que no podía, hubo quienes afirmaron que nunca lograría objetivos como, por ejemplo, de ir a la universidad. Pero mi mirada estaba puesta en Dios. Duele mucho cuando tratan de enterrarte, pero Dios es quién tiene la última palabra. Por eso va levántate.

GIDP. ¿Quiénes colaboraron y dónde fue realizada la producción musical?

El productor de esta canción ha sido Jônatas Bittencourt. El Mix y Máster fueron realizados por Daniel Felipe Mezadri. La producción de backing vocal fue realizada por Hedy Barbosa con las voces de: Hedy Barbosa, Paulo Zuckini y Paloma Possi.

La batería fue realizada por Renan Martins y las guitarras, guitarras acústicas, los teclados, el bajo y las programaciones por Jônatas Bittencourt. Todos ellos brasileños, que realizaron este trabajo desde Brasil.

GIDP. Paralelamente se presenta el video oficial de “Levántate”. ¿Cuéntanos detalles de la filmación y dónde fue realizado en video?

El video fue producido por Javier de Jesús Consuegra Roldán, alías Javier Consuegra, en Barcelona junto a la banda Strong Tower integrada de la siguiente manera: en la batería Oscar Eduardo Ortega García, en el bajo Ramón Alejandro Papasey Dávila, en la guitarra André Alejandro Papasey Dávila y en el piano Sebastián David González Vergara, quien me ayudó a su vez con la melodía y los acordes de esta canción. Pudimos grabar el vídeo en mi actual iglesia CBI, en Barcelona.

GIDP. ¿Cuál es el libro de la Biblia o tu versículo preferido?

Mis dos versículos favoritos son Josué 1:9 y Filipenses 4:8. 

GIDP. Tu testimonio puede impactar en la vida de otras personas de manera especial. ¿Qué mensaje le dejarías a los miles de personas que lean esta nota para alentarlos a confiar en Dios y permanecer siempre a su lado?

Nunca te rindas, no dejes de luchar. Con Dios siempre irás hacía adelante, nunca para atrás. Aunque a veces el camino parezca difícil, esas dificultades te harán crecer y seguirán siendo un impulso para correr esa carrera que Dios nos ha dado, con gozo.

Dios tiene algo nuevo para ti, tu pasado no importa. Él se entregó por ti, por amor, y te ama incondicionalmente.

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Graciela Inés Di Paula

Locutora y actriz de voces egresada del Instituto Superior de Enseñanza en Radiodifusión (ISER) en 1985, se especializó en oratoria con Cursos de Técnicas de la voz en el Teatro Nacional Cervantes. Años después, dedicada al doblaje y acting publicitario, se perfeccionó en la Asociación Argentina de Actores con Dora Guzmán y Ema Ledo (Civiza), realizó Seminarios Intensivos de Doblaje con Dany de Álzaga en Palmera Records; Curso Intensivo de Neutro en Dibujos Animados con Cecilia Gispert y Seminarios de práctica en Ibero que le permitieron llegar a Disney, donde quedó seleccionada como actriz del staff. Luego de conducir durante el 2005 el programa de contenido musical “La Fusa, una nota para pensar” y “La Pisada TV” se abocó a la redacción, entrevista y corrección del periódico El Sello, uno de los tantos productos que contiene el Multimedios La Pisada Producciones que dirige su esposo Carlos Guilermo Teso, tarea que hasta la fecha llevan a cabo desde hace 15 años con pasión y gozo.

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